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viernes 26 de abril del 2024

¿Qué llevó a Central y Newell’s a pelear el descenso?

Finalizó la Superliga para Central y Newell’s, con una sola buena noticia: sus promedios ya no podrán ser peores para el arranque de la próxima temporada. La Lepra sumó apenas 56 puntos en dos campeonatos y al igual que Gimnasia comenzará en zona de descenso junto a los dos equipos que asciendan, mientras que el Canalla cosechó 58 unidades y está apenas por encima.

Claro está, para llegar a semejante situación hay múltiples causas y factores. Cuando los clubes afrontan crisis futbolísticas tan extremas, las famosas tres patas no funcionaron. En Arroyito y en el Parque hubo errores dirigencias, de los cuerpos técnicos y jugadores en bajos rendimientos.

Mayoría de refuerzos que no llegaron ni a ser incorporaciones

Durante los cuatro mercados de pases en los que los directivos rosarinos trabajaron para armar sus planteles, hubo mayor cantidad de errores y algunos pocos aciertos contados con los dedos de una mano. De hecho, recientemente Central despidió a su director deportivo, Mauro Cetto, mientras que Newell’s tiene a Sebastián Peratta en ese cargo, pero muy cuestionado.

Es decir, desde mediados de 2017 pasaron con mucha más pena que gloria la mayoría de los «refuerzos». En el Canalla, fueron completamente fallidas las apuestas por el Ruso Rodríguez (hoy cedido a Defensa y Justicia), Marcelo Ortiz, Fernando Tobio, Oscar Cabezas, Santiago Romero, Diego Arismendi, Gonzalo Bettini y Claudio Riaño.

A su vez, rindieron muy por debajo de las expectativas previas Néstor Ortigoza y Fernando Zampedri, mientras que aún hay algo de crédito abierto para Jarlan Barrera, el emblemático caso por el cual Central casi va al TAS en el conflicto con Tigres, Nahuel Molina, Agustín Allione y Duván Vergara.

Sin lugar a dudas, en este período los aciertos fueron Leonardo Gil, Alfonso Parot, Matías Caruzzo y Fabián Rinaudo, quienes deben formar parte de una estructura en la cual sentar bases para la próxima temporada junto a dos del club que siempre respondieron como Jeremías Ledesma y Germán Herrera.

Con respecto a la vereda de enfrente, la lista de errores en los jugadores contratados es enorme y comienza con Brian Sarmiento, que llegó al Parque con todo un aparato mediático extrafutbolístico, un perfil demasiado alto que jamás pudo equiparar con sus rendimientos en cancha y terminó yéndose por la puerta de atrás.

La nómina continúa con: Mauro Guevgeozián, Nery Leyes, Fernando Evangelista, Hernán Bernardello, Daniel Opazo, Leandro Grimi (llegó con una lesión crónica y no jugó ni un minuto), Lisandro Alzugaray, Zé Turbo, Iván Piris, Angelo Gabrielli, Emanuel Biancucchi, Ribair Rodríguez, Alfio Oviedo y Cristian Insaurralde.

El acierto más grande fue el arquero Alan Aguerre, a quien hace pocas semanas le compraron el pase. También lo fue Luis Leal, de una primera temporada en muy alto nivel, aunque luego que la Lepra adquiera su ficha decayó en su rendimiento y recién sobre el final de la Superliga comenzó a recuperar parte de su mejor versión.

A su vez, por el momento está por debajo de las expectativas Mauro Formica, en su segundo regreso al club, aunque por sus enormes cualidades y su historia en Newell’s tiene el crédito completamente abierto y junto a Maxi Rodríguez reúnen la mayor parte de la ilusión leprosa para mantenerse en la categoría.

Proyectos de inferiores devastados

En Central lo que sucedió es que tras la camada que le dejó una enorme cantidad de millones de dólares con las ventas de Giovani Lo Celso, Franco Cervi y Walter Montoya, últimos frutos del trabajo de José Pascuttini, no hay ningún futbolista surgido de la cantera que se haya podido afianzar en primera. Una tras otra, dilapidaron varias chances Joaquín Pereyra, Andrés Lioi, Facundo Rizzi, Diego Becker y Maximiliano Lovera, entre otros.

Para proyectar a futuro, tuvieron aprobadas participaciones en el equipo principal auriazul el zaguero Facundo Almada (con Paulo Ferrari) y los volantes centrales Emanuel Ojeda (con Edgardo Bauza) y Rodrigo Villagra (con Diego Cocca).

Con respecto a Newell’s, las urgencias económicas llevaron a vender de forma apresurada y casi «regalando» su patrimonio en varios casos. El más emblemático el de Lisandro Martínez, figura de la revelación del torneo Defensa y Justicia y convocado a la selección argentina. También al Halcón se fue Ezequiel Unsaín, de destacado rendimiento. Otras transferencias que sólo fueron para tapar huecos: Héctor Fértoli (San Lorenzo), Milton Valenzuela (MLS), Jalil Elías y Joaquín Varela (ambos a Godoy Cruz). 

A favor, en el ciclo de Héctor Bidoglio se afianzaron Braian Rivero y Jerónimo Cacciabue, sobre todo cuando formaron el doble cinco, perjudicados por el cambio al esquema 4-3-3 de las últimas dos fechas. También creció en confianza Alexis Rodríguez.

Prolongada banca a los entrenadores

Los dos clubes tuvieron en común en esta etapa negra que los lleva a pelear por no descender, el hecho que no pudieron finalizar en el tiempo justo los procesos fallidos de sus cuerpos técnicos. Los auriazules comenzaron con Paolo Montero, que en ocho fechas sumó sólo cuatro puntos (todos empates) sobre 24 posibles y se sostuvo únicamente porque avanzaba en la Copa Argentina. Algo de oxígeno llegó gracias a las 27 unidades que cosechó Leo Fernández sobre las 51 disputadas, mientras que José Chamot terminó la temporada 2017/18 con una derrota y una igualdad. 

Con la ilusión renovada por la vuelta de un ídolo como Edgardo Bauza se encaró la Superliga 2018/19. El arranque fue perfecto con tres victorias en las primeras tres presentaciones pero luego cayeron abruptamente rendimientos y resultados. Pese a la conquista en la Copa Argentina, en el torneo el Patón sumó 21 puntos de 60 posibles. Lo reemplazó Paulo Ferrari que apenas aportó dos de nueve y Diego Cocca (el único que ganó un partido en 2019) con tres unidades sobre las seis que disputó.

En la vereda de enfrenta la cosa no fue muy diferente: el comienzo fue con Juan Manuel Llop, de una pobrísima campaña que se debió haber interrumpido bastante antes. El Chocho sumó 16 puntos de 48 posibles en sus 16 fechas al frente del equipo. Fabián Garfagnoli dirigió dos encuentros de manera interina con un empate y una derrota. 

Su sucesor mejoró los números como local, pero no logró enderezar el rumbo como visitante: Omar De Felippe tuvo otra magra cosecha con 25 unidades conseguidas de las 66 que disputó. Bidoglio empezó como interino, renunció, lo convenció el plantel y sigue hasta el final de la Copa de la Superliga: aportó 17 puntos de 36.