15°
jueves 25 de abril del 2024

Qué es la parosmia, una de las secuelas que puede dejar el coronavirus

Roi Piñeiro, infectólogo y nefrólogo, Jefe del Servicio de Pediatría del Hospital General de Villalba en Madrid, se refirió a una de las consecuencias del virus.

Investigadores de todo el mundo estudian las secuelas del coronavirus. Si bien algunos pacientes logran recuperarse en su totalidad, en algunos quedan consecuencias que deben abordar para mejorar su salud física y emocional.

Roi Piñeiro, infectólogo y nefrólogo, Jefe del Servicio de Pediatría del Hospital General de Villalba en Madrid, conversó este viernes en CNN Radio sobre una de las secuelas que puede dejar el covid-19, denominada parosmia.

“Es uno de los síntomas que se asoció más al coronavirus, a la variante delta, con ómicron es menos habitual”, dijo en Café con Pepe, “que puede afectar tanto a niños como a adultos”.

En diálogo con Pepe Gil Vidal explicó que «antes de la parosmia se presenta la anosmia, que es la pérdida absoluta de olfato, y la disgeusia, que es la alteración del gusto». Ambos síntomas pueden durar 5 días, 1 semana y hasta 4 meses; luego empieza una recuperación paulatina.

A algunos pacientes que no logran recuperar el 100% del olfato la parosmia les queda como secuela y consiste en que “las cosas dejan de oler a lo que nosotros recordábamos que olíamos”, aunque aclaró que no necesariamente afecta a todos los olores.

¿Cómo se la combate? Con rehabilitación olfatoria. “Es una serie de olores a los que acostumbrar al cuerpo para que los recuerde”.

«Está claro que el covid no solo afecta las vías respiratorias, también puede producir alteraciones en el endotelio y esto puede dar lugar también a secuelas neurológicas, aunque por suerte son pocas», señaló.