El cambio de sede de la final de la Copa Libertadores que van a disputar River y Flamengo obligó a encontrar una cancha que cumpliera con todos los requisitos para un partido de semejante envergadura. El Monumental de la U, de Lima, es el escenario elegido y desde la designación que trabajan para que el campo de juego llegue en condiciones óptimas.
En principio hay cierta preocupación por el césped, que presentó algunas irregularidades y está, a comparación del ideal, bastante seco. Sin embargo, confían en que con los trabajos que realizarán de acá al sábado 23 de noviembre podrán lograr que esté en condiciones cercanas a las ideales.
Las imágenes que se difundieron del campo de juego difieren drásticamente cuando se ven con luz natural y cuando la luz es artificial. De todos modos, en los últimos partidos si bien el césped no mostró su mejor versión, no fue un problema para Universitario, que el sábado jugó allí por última vez en la victoria por 3-2 sobre Ayacucho.