Pediatric Hal es el nombre del robot que fue creado para facilitar las experiencias que puedan llegar a tener a futuro médicos y pediatras con niños reales. El mismo habla y actúa como un niño, simula emociones comunes como asombro, miedo, ira o ansiedad. Sobre todo, es capaz de simular dolor. Hasta incluso llega a llorar y gritar.
El robot tiene un gran apariencia física real pero no es lo único que asombra de él, también su actitud se asemeja a la de un niño. Puede gritar, alterarse y decir frases tales como «quiero irme a mi casa» o «quiero a mi mamá». También cuenta con pulso propio y es capaz de llorar y sangrar. Podría incluso llegar a sufrir un paro cardíaco.
Existe una razón por la que se diseñó como un niño. La compañía Gaumard Scientific explica que los retos que presentan los pacientes de pediatría difieren de aquellos que se enfrentan con un adulto. Los niños responden de forma diversa, sus respuestas son variadas, al igual que la forma en la que funciona su cuerpo o en la que reacciona a medicamentos en específico.
A demás, la empresa norteamericana, que tiene sede en Miami, se dedica desde la Segunda Guerra Mundial a brindar mediante la tecnología asistencia médica. Aseguran que su más reciente invento el niño robot es el simulador pediátrico más evolucionado a nivel mundial.
