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jueves 25 de abril del 2024

«Llama la atención el grado de desesperación para conseguir las vacunas»

El epidemiólogo rosarino Ramiro Salazar remarcó que “hay que evaluar los efectos a largo plazo, no los inmediatos”.

El presidente Alberto Fernández ratificó en el día de ayer el Estado Nacional tiene la posibilidad de adquirir, entre diciembre y enero, 25 millones de vacunas Sputnik V» contra el coronavirus producidas en Rusia y aseguró que encargó que se desarrollen «todos los pasos necesarios para garantizar que cuenten con el debido registro».

Asimismo, el Primer Mandatario manifestó que se trata de una avance muy importante porque “si todo sale según lo esperado nuestro país estará en condiciones de comenzar a vacunar a la población de riesgo entre el final de este año y el comienzo del próximo».

En ese marco, el médico epidemiólogo Ramiro Salazar analizó la decisión tomada por el gobierno y manifestó que “llama la atención el grado de desesperación para conseguir las vacunas que, no es el mismo que para asegurarse de que esas vacunas sean testeadas en el tiempo”.

“Además de comprarlas deberían asegurarse de que esas vacunas que sean testeadas en el tiempo. Para evaluar los efectos indeseables que no pueden ser evaluados a los 30 segundos de aplicada la vacuna”, señaló el especialista en diálogo con Radio Mitre Rosario.

En tanto, Salazar sugirió que “habría que retomar un poco la calma y hacer una lectura de lo que esta ocurriendo en Argentina y el mundo en relación a los diagnósticos y los certificados de defunción. Hay que analizar como se confeccionan si es causa o es comorbilidad el coronavirus”.

Sobre el proceso normal de la producción de una vacuna, el especialista explicó que, en primer lugar “debe cumplir las fases de experimentación en animales y luego la fase clínica en las personas”.

Y detalló: “La fase animal es primordial, allí se ve si se generan los anticuerpos que se tienen que generar, si genera la defensa que se necesita y segundo que no produzca los efectos colaterales, que pueden ser inmediatos o tardíos, que pueden demorar hasta tres años, por eso hay que evaluar los efectos a largo plazo, no los inmediatos. Eso es lo más importante y no se esta evaluando”.

Con respecto a ello, el médico expresó que «la gente esta demandando la vacuna y el gobierno quiere demostrar que están resolviendo el problema y pretenden hacerlo con la magia de la vacuna, pero no resuelva el problema de base que es el terreno respiratorio humanos donde se asienta la enfermedad» y argumentó: «Todos sabemos que existe la vacuna para la gripe, pero no  resuelve el problema de la gripe».

«La vacuna no resuelve el terreno de base. Es un instrumento medicamentoso y no la solución», afirmó y remarcó que «dbee ser garantizar al pueblo la seguridad y la eficacia del producto. debe ser previamente evaluado en el tiempo»