Los profesionales de la odontología exigen ser vacunados contra el coronavirus porque consideran que están “en un trabajo de altísimo riesgo”, por lo que aguardan ser incluidos en el proceso de vacunación con la segunda tanda de 300 mil dosis de la Sputnik V que llegará al país este sábado proveniente de Moscú.
A su vez, esperen que se decrete de forma oficial a la profesión como de alto riesgo debido a la importante exposición que tienen en cada atención a los pacientes. Con respecto a las medidas higiénicas con las cuales trabajan en los consultorios, reforzadas por la pandemia, el presidente del Colegio de Odontólogos de la Provincia de Santa Fe, 2da Circunscripción, Raúl Allín, contó: “Hubo un antes y un después cuando apareció el Sida. Cambiaron todos los protocolos de atención, esterilización, se reforzaron, a partir de ahí se tomó con muchísimo cuidado todo, entonces las prácticas en odontología son muy seguras. Cuando vino la pandemia nos cubrimos por demás y por suerte no tenemos ningún reporte en nuestra jurisdicción, la mitad sur de la provincia, de colegas que se hayan infectado atendiendo”.
“Obviamente hay colegas que se contagiaron debido a lo que cualquier ciudadano se podría contagiar, pero no en la práctica del consultorio y esto tiene que ver con elementos que vinieron para quedarse en nuestro consultorio. Hay una doble protección, a veces tener un visor, más allá de tener los anteojos o antiparras, o la protección directa, un visor nos aisla un poco más del paciente. A veces se pone una placa acrílica que está suspendida sobre el paciente cuando estamos trabajando”, aseguró en diálogo con el programa Con Sentido Común de CNN Radio Rosario y siguió: “Es un virus de las vías aéreas y cuando nosotros realizamos un tratamiento con un paciente, estamos 30, 40, 50 minutos o más prácticamente con las vías aéreas del paciente en nuestras caras. Ahí es donde podemos absorber el virus con rapidez”.
Consultado sobre el pedido de los odontólogos de ser incluidos en breve en el proceso de vacunación, Allín dijo: “Como Colegio siempre tuvimos esta costumbre de la vacunación. Primero la vacuna iba a ser obligatoria para todo el mundo, así que estamos preparando un recurso de amparo especial porque no podía ser obligatoria. Cuando en la Legislatura Nacional cambiaron y fue optativa o voluntaria, ahí otra vez nos pusimos al pie y ofrecimos nuestra institución para hacer la vacunación de todos los colegas y también al personal, como a la familia de los odontólogos”.
“En un primer momento parecía que lo íbamos a poder hacer en el Colegio. Después por los protocolos, por la carga de datos que tiene que ser muy puntual y precisa, las autoridades prohibieron por el momento que se coloque en instituciones variadas y solo lo hacen en centros de salud de la provincia. En un primer momento íbamos a estar en primera línea, por el tiempo importante de exposición y porque estamos abogando que se declare a la odontología a profesión de riesgo a nivel nacional”, continuó.
A su vez, informó que serían vacunados cuando se empiece a aplicar la segunda tanda con otras 300 mil dosis que arribarán a Argentina: “En la segunda tanda estaríamos todos incluidos, tuvimos conocimiento que en algunos lugares donde no se vacunó el personal que estaba dispuesto a vacunarse, no ocuparon todas las vacunas, entonces sí vacunaron a algunos odontólogos cuando personas de personal de salud esenciales prefirieron no vacunarse. La fecha que nos dieron era que a mitad de febrero ya estaríamos todos vacunados, quiere decir que en la primera quincena de febrero sería cuando, desde la Dirección provincial de odontología van a contactar a todos los odontólogos y desde ahí les van a avisar cuándo vacunarse y a dónde se deben dirigir».
Por último, Allín manifestó que «los odontólogos están todos preocupados» y que les reclaman «cómo no se consiguió que se nos vacune antes», por lo que aclaró: «La dirección provincial de odontología considera que todos en nuestra profesión deben estar vacunados. Los odontólogos nunca vamos a salir de fase 1 porque estamos siempre en un trabajo de altísimo riesgo, para nosotros es esencial la vacuna”.
