Las altas temperaturas de estos últimos días obligó a los rosarinos a buscar la forma de refrescarse. En un contexto enrarecido por la pandemia del coronavirus, creció más de lo pensado el uso de piletas hogareñas y cada una demanda una importante cantidad de litros de agua, servicio esencial que escaseó el pasado fin de semana en varios puntos de la región.
En relación a esta situación, el vocero de Aguas Santafesinas, Guillermo Lanfranco, expresó: «No es una prohibición llenar la pileta con agua potable, lo que sí no es aconsejable hacerlo, porque básicamente es agua para consumo esencial, que poco tiene que ver con llenar la pileta. Entendemos que es necesario tener un lugar donde refrescarse, pero decimos de hacerlo de forma solidaria y responsable. No estar renovando todo el tiempo el agua de la pileta. Y hacer un mantenimiento de esa agua con cloro».
Funes fue una de las ciudades que más sufrió por la falta de agua: «El problema es el mismo, mucha demanda y la planta tiene capacidad para uso esenciales», aseveró Lanfranco en diálogo con El Puente de Radio Mitre Rosario. «El servicio está garantizado si la demanda es razonable. Si tengo días de térmicas de casi 40 grados o 35 por lo menos, no hay un uso racional del servicio, en algunas zonas podemos tener problemas», agregó.
«Hay zonas que nunca van a tener problemas y otras que son más propensas a tener problemas porque están más lejos de las estaciones de bombeo y el agua recorre mucha distancia. La bajante del río Paraná suma para mal, la altura está baja y hace que los equipos que tengan que trabajar con una presión y demanda que no es lógica», concluyó.
