El juicio contra Pablo Andrés Akerman comenzó este martes. El inspector municipal está acusado por haber habilitado el Café de la Flor, bar donde en octubre de 2015 falleció el bajista Adrián Rodríguez tras una descarga eléctrica en pleno recital. Por este motivo, Joel Pereyra, compañero de la víctima, dialogó con el programa El Puente por Radio Mitre Rosario y destacó que, a pesar de “remover viejas heridas, el inicio de este procedimiento genera expectativas para que “se cumpla la condena”.
Pereyra detalló que “este juicio es técnico”, pero que lo van presenciar para seguir de cerca la cuestión. “Tenemos la esperanza de que se cumpla, que se haga justicia”, insistió y agregó que confían en la resolución del juez: “Queremos creer que se va a poner los pantalones y va a sentenciar justicia”. En tanto, esperan con ansias la condena y están decididos a “bancar lo que venga”.
Por último, se refirió al acusado. Según explicó el joven, Pablo Andrés Akerman fue quien realizó la última inspección en el bar. Además, detalló que el inspector “iba a resolver un par de cuestiones y nunca volvió”. De este modo, el local quedó habilitado y tras ser imputado, fue ascendido por la Municipalidad. “De dar una inspección de cómo está un lugar a tener gente a cargo, parece un chiste”, culminó Joel.
