La medida anunciada gobernador Omar Perotti en la cual decreta que las actividades deben finalizar a las 19.30 generó un inmediato rechazo del sector mercantil, que llevó a una manifestación en la que participaron al menos 2 mil personas. Si bien, desde el Gobierno de Santa Fe son consciente de este descontento, aseguran que es una alternativa “para dar respuestas a la creciente cantidad de casos”.
En ese marco, ministro de Gestión Pública de Santa Fe, Rubén Michlig, señaló que la totalidad del sector ligado a lo sanitario, están de acuerdo con la medida y hasta entienden que “no alcanza”.
“Es una medida para dar respuestas a la creciente cantidad de casos, a la reducción del tiempo de duplicación de contagios. Atenuar la ascendente curva de contagios para poder generar un sistema de salud previsible que tenga una cantidad de camas disponible”, aclaró Michlig en diálogo con Radio Mitre Rosario.
Y aseguró que la decisión «ha sido mínima en relación a la que se podía tomar”.
Asimismo, el funcionario se mostró con expectativas sobre los resultados y evitar “volver a un aislamiento total”. “Es entendible el malestar o las dificultades que se generan en algún sector en particular, pero entendamos que, no se esta restringiendo la actividad, sino disminuyendo parcialmente el horario de funcionamiento”, manifestó.
Sobre el malestar del sector gastronómico, –los más afectados con la medida- Michlig aclaró que “no tiene que ver con o no de los protocolos específicos”, aunque resaltó que “algunos casos no se cumplieron en la medida de los esperado”.
“Es una alternativa temporaria y tiene que ver que ver con la alternativa de reducir la circulación del virus, eso tiene que entender una gran parte de la población, por que la mayoría esta a cargo de esa decisión”, concluyó.
