Con un tanto de Lionel Messi, Barcelona venció este miércoles 2-1 al Slavia de Praga y suma 7 puntos en tres partidos jugados en el Grupo F de la Liga de Campeones. Gracias a esta victoria, quedó como líder por encima del Inter y del Borussia Dortmund.
Iban apenas dos minutos cuando el conjunto catalán se puso en ventaja. La Pulga recuperó una pelota en la zona alta y encaró hacia el centro desde la derecha. Ante la presión, buscó a Arthur, quien recibió sólo por izquierda y encaró hacia al área. El brasileño juntó tres marcas, utilizó la diagonal de Suárez como anzuelo y buscó nuevamente al argentino, quien se había filtrado entre los defensores y definió de primera con un zurdazo al segundo palo imposible para el arquero.
A pesar del triunfo parcial, el elenco visitante no mostró su mejor versión y sufrió en el fondo. La figura de la primera parte fue sin dudas Marc Ter-Stegen quien tapó tres remates de media distancia impresionantes, uno de ellos con los pies.
El conjunto culé pudo también haber ampliado el marcador con un disparo cruzado en el área de De Jong cerca de los 40 minutos, que tapó Ondrej Kolar.
En el complemento, el Slavia Praga pudo finalmente dar con el empate. Una pésima marca de los centrales del conjunto español en un balón largo, permitió que tres jugadores locales llegasen a posición de gol. Fue así que Boril quedó mano a mano con Ter Stegen y pudo superar al alemán y festejar el 1 a 1.
El tanto parecía ser el comienzo de la remontada para el cuadro checo, sobre todo porque inmediatamente después tuvo otras dos aproximaciones que hicieron temblar el arco del Barcelona. Sin embargo, los de Valverde se encontraron nuevamente en ventaja por una casualidad.
En un tiro libre desde la izquierda, Messi buscó un centro al segundo palo que encontró a Suárez. El uruguayo evitó que el balón se perdiera por línea de fondo y en su intento por meterla al centro del área, éste golpeó en Olayinka, jugador del Slavia Praga, e ingresó al arco para el 2 a 1.
La salida de Griezmann y en lugar de Dembélé generó una mejora en ataque del Barcelona que a pesar de los nombres que tenía en el terreno de juego no fue en ningún momento superior al rival y sufrió las embestidas del local. Ter Stegen terminó, una vez más, salvando al equipo.
