Pasaron 40 años de la guerra de Malvinas, pero para el Teniente Coronel Víctor Hugo Rodríguez, veterano y presidente de la Asociación Cultural Sanmartiniana “Cuna de la Bandera”, parece que fue ayer. Tiene los recuerdos más vívidos de lo ocurrido, sobre todo, de sus compañeros, de los caídos y de los que sobrevivieron.
Así lo dejó evidenciado en una entrevista que brindó al programa El Puente, que se emite por Radio Mitre Rosario, durante la que recordó los días de combate y reflexionó acerca de la desigualdad de condiciones entre Argentina e Inglaterra.
«Quiero que se entienda lo que significa haber peleado contra los ingleses, contra Estados Unidos, la OTAN, contra todo ese mundo que hoy está en contra de Rusia; todo ese mundo peleó en contra de nosotros», expresó Rodríguez.
En ese sentido, reflexionó: «Europa, la OTAN, Estados Unidos les dieron todo lo que tenían para que nos aplasten, era el norte contra el sur pobre, el norte rico de Europa aplastando a un país sudamericano».
De ahí que reconoció: «Nunca íbamos a ganar, por eso a nosotros habernos parado de manos en el terreno, como infantes, peleando mano a mano con los ingleses nos hace muy felices».
Durante toda la charla destacó el orgullo que significó para él haber estado en las Islas. «Ser el mismo sable que Güemes, el mismo fusil del General san Martín, ser el sable mismo de Lavalle, nos sentíamos identificados con eso», resaltó el veterano.
A pesar de que la derrota era inevitable, el Teniente dijo que los soldados dejaron todo en la previa y durante lo que duró el conflicto. «En la vorágine nos preparamos con toda la fuerza y la voluntad para pelear y para el combate al 100 por ciento. Recién en combate advertimos que íbamos a perder».
Además, contó un peosodio que quedó grabado en su memoria. «Me acuerdo cuando estuve prisionero que un soldado inglés me dijo ‘para nosotros viene primero la tecnología, después la logística, luego la instrucción y último el valor. Del lado nuestro ¿qué había? Valor nada más, no había tecnología ni, logística».
Por último, confió que con varios de sus compañeros tienen un grupo de Whatsapp, donde el saludo y los recuerdos son cotidianos. «El amor es imbatible», cerró.
