Otro de los sectores afectados por la fuerte escalada del dólar y el contexto de crisis económica es el panadero. Según expresó en Radio Mitre Rosario Gerardo Di Cosco, presidente de la Asociación de Panaderos de Rosario, por la escala de la divisa nortemericana los molinos harineros no le venden harina ni otras materias primas a las panaderías.
«Ayer ya los molinos harineros suspendieron la venta de harina, grasas, margarinas y levaduras por la suba del dólar. Abrimos nuestras panaderías sin saber los precios de referencia de los insumos básicos para la industria», alertó Di Cosco. Y reveló que algunos lugares trabajan día a día -son los más afectados- y otros aguantan con materia prima una semana. «Si esta semana no tenemos precio ni materia prima que entre la semana que viene no vamos a poder abrir», advirtió.
Di Cosco explicó que por esta situación no tienen un precio justo de venta al público: «Hoy abrís una panadería y no sabés si le estás cobrando de más o de menos a la gente. Si aumentás le estás robando, si cobras más barato no es lo que corresponde». «El kilo de pan está en aproximadamente entre 70 y 80 pesos y la factura entre 10 y 13 pesos en los bares de Rosario», agregó con respecto a los valores actuales.
El trabajador también se refirió a la conferencia de prensa que brindó este lunes Mauricio Macri post subida del dolar: «Pensábamos que cuando iba a hablar el presidente iba a calmar un poco los mercados pero por lo que estamos viendo está muy convulsionado esto». Y sostuvo: «Humildemente yo llamo un poco a la reflexión y que nos calmemos un poco. Hay mucha gente que la está pasando muy mal».
«La industria nuestra, un producto tan básico en la canasta del argentino, no podemos dejarlo sin fabricar. Llamo a la cordura, que tengan un poco de conciencia y que no hagan locuras. Realmente el salario de la gente no alcanza para seguir subsistiendo en nuestro país», agregó preocupado.
Por último, habló respecto a la situación actual y sobre el futuro: «Es muy probable que haya aumento, algo se va a tener que retocar. No somos especuladores ni grandes industrias, tratamos de acompañar el aumento de la materia prima. Convengamos que hoy aumentar significa vender cada vez menos, la gente no tiene dinero en su bolsillo. Uno nota en la gente que cada vez viene con menos dinero para comprar pan. Además en este último tiempo por lo menos se duplicó la gente que entra a pedir».
