De la mano de Cristian González, el flamante entrenador de Central, dos de los principales deseos de los hinchas canallas se reactivaron y podrían cumplirse dentro de muy poco tiempo. Ezequiel Lavezzi saldría del retiro y podría vestir por primera vez la camiseta del club de los amores y tiene la intención de poder hacerlo desde enero de 2021 junto a Ángel Di María, si logra salir del Paris Saint-Germain seis meses antes que finalice su contrato.
Según trascendió en las últimas horas, las constantes llamadas del Kily al Pocho habrían surtido efecto y quien anunció que dejaba la actividad profesional a finales de 2019 estaría convencido de volver a calzarse los cortos para cumplir su sueño personal de jugar en el Canalla. Desde su círculo íntimo contaron que las dolencias en su rodilla que lo llevaron a alejarse del fútbol disminuyeron considerablemente al no estar en competencia, que se siguió entrenando y una vez que finalice asuntos personales que le quedaron en Francia, podría estar en Rosario entre octubre y noviembre para comenzar un reacondicionamiento físico y poder salir a la cancha de manera oficial a partir de enero del año próximo.
El anhelo máximo del mundialista en Brasil 2014 y al que obviamente adhiere González es que también se sume Di María, cuya salida del PSG podría facilitarse un poco más que ahora si lo solicita a seis meses de terminar su vínculo. De lo contrario, sería casi un hecho que a más tardar de 2021 volverá a vestir la casaca auriazul que utilizó entre finales de 2005 y mediados de 2007 cuando fue transferido al Benfica. Mientras tanto, el Kily no para con su tarea fina de convencer a las dos figuras para que lleguen a apuntalar a un plantel conformado en gran medida por juveniles del club.
Sobre Lavezzi, el nuevo técnico auriazul declaró el viernes pasado en la Oral Deportiva que «se muere por jugar en Central» y agregó: «Está de vacaciones, sé que se muere por ponerse la camiseta de Central y sé lo que siente por el club y es cuestión de ver muchas cosas, sobre todo qué quiere él. Nosotros tenemos que abrirles las puertas a todos los que quieran estar en Central».