Las bebidas suele ser una de las razones por las que mucha gente no logra perder peso. La razón: se suman calorías sin darnos cuenta que impiden el descenso de grasa corporal.
Para evitar este error es importante ser consciente de lo que ingerimos reconociendo las bebidas que aportan cero calorías: café negro, agua, infusiones como té o mate cocido sin azúcar.
Entre las bebidas que usualmente desestimamos su consumo calórico se destacan las gaseosas, jugos, licuados, café con leche o capuccino y cerveza por ser la bebida con menor graduación alcohólica dentro de su grupo.
La versión de gaseosas sin azúcar no es aconsejable porque a pesar de que no contienen calorías, su gran aporte de sodio genera retención de líquidos e hinchazón dificultando así la eliminación de grasa y pérdida de peso.
La licenciada en nutrición Estefanía Beltrami afirma que “existen algunos aimentos como la gelatina light, gaseosas sin azúcar y las infusiones que son muy bajos en calorías y por ese motivo muchas personas se abusan de su consumo para reducir los niveles de ansiedad. Sin embargo, esto no es una buena práctica”.
“Porque el hambre se soluciona consumiendo alimentos que nos aporten nutrientes y no aire”.
En el caso de los jugos de fruta un exprimido de naranja duplica en calorías una naranja por lo que no es una buena opción si estamos buscando perder peso. Las bebidas cero calorías no contienen azucares y la más efectiva es el agua.
