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jueves 25 de abril del 2024

La prevención del embarazo adolescente

UNICEF presentó un informe sobre embarazo adolescente que analiza la última información censal disponible que indica, entre otros datos, que en Argentina nacen anualmente entre 2800 y 3200 niños de madres menores de 15 años.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) el embarazo en la adolescencia sigue siendo uno de los principales factores que contribuyen a la mortalidad materna e infantil y al círculo de enfermedad y pobreza.

Algunas adolescentes planean y desean su embarazo, pero en muchos casos no es así. Muchas chicas no saben cómo prevenirlo debido a que en muchos países no hay educación sexual. En algunos casos las adolescentes no pueden negarse a mantener relaciones sexuales no deseadas o a oponerse a las relaciones sexuales forzadas, que suelen ser sin protección.

Las complicaciones durante el embarazo y el parto son la segunda causa de muerte entre las chicas de 15 a 19 años en todo el mundo. Cada año se practican unos 3 millones de abortos peligrosos entre muchachas de 15 a 19 años, lo que contribuye a la mortalidad materna y a problemas de salud prolongados.

Siguiendo la línea de UNICEF el abordaje del embarazo en la adolescencia requiere de una desagregación del concepto para ofrecer respuestas acordes a cada situación y con una mirada integral que contemple tanto la educación en salud sexual y reproductiva para proporcionar información objetiva e integral acerca de los métodos anticonceptivos, cubrir los vacíos de conocimiento acerca de su uso correcto y los efectos secundarios típicos, para mejorar su comprensión respecto del método y las posibles consecuencias del uso incorrecto.

De acuerdo con los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) los médicos, enfermeros y otros proveedores de atención médica pueden:

  • Instar a las adolescentes a no tener relaciones sexuales.
  • Reconocer a los anticonceptivos reversibles de larga duración (LARC) como una opción segura y eficaz de anticoncepción para las adolescentes sexualmente activas.
  • Ofrecer a las adolescentes una amplia gama de opciones de anticoncepción, incluidos los LARC, y hablar sobre las ventajas y desventajas de cada una.
  • Hacer capacitación sobre cómo colocar y retirar los LARC, tener suministros de estos dispositivos disponibles y explorar las opciones de financiamiento para cubrir el costo.
  • Recordar a las adolescentes que con solo tener un LARC no están protegidas contra las enfermedades de transmisión sexual y que se debe usar también un condón cada vez que tengan relaciones sexuales.

En relación con las políticas públicas orientadas a las madres adolescentes, uno de los grupos más vulnerables, Gabriel Castelli, viceministro de Desarrollo Social de la Nación, sostiene que los Centros de Primera Infancia (CPI) son una respuesta efectiva.

«En este momento están funcionando 680 en todo el país, y son cerca de 240 los que están en proceso de firma. Además estamos tratando de ubicarlos cerca de las zonas más vulnerables y donde hay más casos de embarazos adolescentes» explica.

También reconoce que debería trabajarse desde el Ministerio de Educación para que estas mujeres no tengan que dejar la escuela, y desde el de Salud para hacer campañas de concientización y brindar métodos anticonceptivos efectivos.