La Justicia condenó este martes a tres años de prisión al exjugador de Rosario Central, Marcelo Alberto Toscanelli, campeón del equipo canalla en 1987, acusado de ser jefe de una banda de juego clandestino. Además, deberá pagar una multa de dos millones de pesos. Sin embargo, purgará la pena en su domicilio dado que padece problemas de salud.
Toscanelli declaró en la causa como arrepentido. De todas maneras no pudo salvarse de la condena dictada por el juez Martín Gauna Chapero en el marco de un juicio abreviado en la localidad de Vera.
De acuerdo a los fiscales Rubén Martínez y Nicolás Maglier, el acusado de liderar la asociación ilícita dedicada al juego ilegal «reconoció que era el receptor final de las apuestas que se realizaban a través de la plataforma informática Aconcagua Póker».
«La actividad clandestina que realizaba la asociación ilícita perjudicó a la administración pública a través del ocultamiento de la actividad. Sumas millonarias de dinero eran detraídas del juego regular y autorizado –del que resulta beneficiario directo el Estado e indirecto los contribuyentes–, lo cual hace mermar las arcas estatales y sus posibilidades de subvenir a las necesidades públicas”, consideraron, además, los funcionarios, entre otros puntos.
