Cristian “Kily” González dijo este domingo que “la expulsión podría haber sido amarilla” cuando Nicolás Ferreyra vio la roja en el partido contra Argentinos Juniors por la fecha 14 de la Liga Profesional. Además, dijo que tras la expulsión “fue otro partido”.
“La expulsión podría haber sido amarilla tranquilamente, pero son decisiones que tomó el árbitro y desgraciadamente nos perjudicó. Ahí el partido un poco se partió con un hombre menos, se hizo todo mucho más cuenta arriba”, dijo el director técnico de Rosario Central.
En la misma línea, aseguró que el plantel cuenta con varios juveniles a los cuales les falta experiencia en el campo de juego, pero es algo a lo que el club apostó. “Somos un plantel donde hay muchos juveniles y hay que asumirlo”, señaló.
“Hay que seguir aprendiendo, son gente muy joven que es lo que al club le apostó, porque es muy fácil decir ‘está todo mal’, pero estoy acostumbrado. Yo soy el primero en poner la cabeza como hice siempre y nuevamente lo haré y con mis jugadores”, lanzó González.
En cuanto al partido, el entrenador reconoció: “Los primeros minutos hasta la expulsión generamos muchas situaciones, empujamos, pero después el partido se parte y ya empezaron los errores y termina de complicar el gol apenas arranca el segundo tiempo”.
Por último, González se refirió a la vuelta del público al Gigante de Arroyito: “Hoy teníamos en el plantel siete juveniles donde la mayoría nunca había jugado con gente, pero los jugadores obvio que quieren jugar con público y creo que quedó demostrado. Lo que más nos duele es no poder darle una alegría a ellos después de tanto tiempo”.
