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miercoles 24 de abril del 2024

La emoción de Pacu Cuneo, capitán de Old Resian: “Este título es un sueño hecho realidad”

El referente del reciente campeón del Torneo Regional del Litoral habló con Rosario Nuestro y confesó: "Esto representa todo para mí, es una alegría inmensa".

Quedar en la historia de un club, cumplir el propio sueño, dejar una huella para la eternidad, momentos imborrables para todo Old Resian y para su capitán, Francisco Cuneo, que a poco soplar las 32 velitas se dio el gusto de su vida, la misma que lo tuvo ligado a la institución de Wilde y Mendoza desde su más tierna edad.

¡Old Resian, el nuevo rey!

«Este título para mí representa todo, es una alegría inmensa, un sueño hecho realidad», confesó Pacu en una entrevista exclusiva que brindó a Rosario Nuestro, en la cual habló con un profundo orgullo de sus compañeros. «Tiene un sabor especial porque me tocó ser capitán y comandar este barco de hombres que son unas fieras y me han hecho todo mucho más fácil», aseguro y añadió: «Quiero agradecerles porque fueron fieles a mis convicciones, nunca dudaron de mi capacidad, ni de mi confianza, ni de la idea mía de salir campeón. Los convencí que se podía y nunca bajaron los brazos».

– ¿Podés creer lo qué lograron para la historia del club? 

Con el tiempo, de a poco uno va a ir cayendo, cuando suceden las cosas uno no le da la importancia que merece, sino que cuando pasan los años y uno mira para atrás se da cuenta de los logros que tuvo y fueron importantes. Tengo bien claro lo que representa para la historia del club lo que logramos.

– ¿Qué representa para vos este título?

Este título para mí representa todo, juego en el club desde los 4 años, cumplo 32 años así que hace 28 que juego al rugby y 26 los pasé en el club salvo dos que estuve en Hindú en Buenos Aires. Pasé por todos los momentos, buenos o malos, de todos los colores y la verdad que lograr esto es una alegría inmensa, un sueño hecho realidad. Tiene un sabor especial porque me tocó ser capitán y comandar este barco de hombres que son unas fieras y me han hecho todo mucho más fácil.

– Al haber sido una final tan cerrado, ¿temieron qué se les escape el título?

Fue una final cerrada y siempre está la posibilidad que se te escape un partido a último momento, pero estaba muy convencido que íbamos a salir campeón, internamente tenía mucha fe, confiaba mucho en mis jugadores. En el transcurso del partido, si bien ambos equipos nos equivocamos, creo que Old Resian fue un poco más y propuso más juego que Jockey.

– ¿En qué momento del torneo sintieron que estaban para salir campeones? 

Siempre al principio del torneo, desde la pretemporada inclusive, uno arranca con la mayor de las expectativas. Por supuesto con el correr de los partidos, de los entrenamientos, y viendo los resultados, ir comparándote con los mejores, viendo cómo estás internamente con el grupo. Arrancamos bien, tuvimos partidos muy buenos y cuando jugamos contra Jockey en las Cuatro Hectáreas y tuvimos un buen partido de visitante, nos fuimos dando cuenta que estábamos para cosas serias. Todos estábamos convencidos que se podía salir campeón desde un principio, desde la pretemporada, pero te terminas de convencer cuando van pasando los partidos y te das cuenta que agarras ritmo, mejoras, vas ganando y te haces fuerte en lo tuyo.

– ¿Cuáles son las claves que tuvo el equipo para conseguir el título? 

Nos hicimos muy fuertes en defensa, tuvimos un sistema defensivo muy bueno, muy prolijo, me parece que fuimos el equipo al que menos tries le hicieron. Mejoramos mucho el maul tanto en ataque como en defensa, en scrum estuvimos bien y en lo que es en ataque, cuando tenemos un buen día y estamos odenados, somos peligrosos. Tuvimos buenos tries en el torneo. Nuestro estandarte fue la defensa, el tackle, y cuando se pudo lo complementamos con buenas destrezas en ataque. En estos años, gente que hemos jugado al rugby toda la vida en el club nos hemos encontrado con una edad lo suficientemente madura para poder afrontar este tipo de compromisos, hemos sumado a buenos entrenadores, algunos jugadores con experiencia han colaborado también. Es una sumatoria de varias cosas y la idea es seguir creciendo, apuntando a ser competitivos en el tiempo.

– Desde que el equipo ascendió se notó un gran crecimiento, ¿a qué se debe? 

Desde que se subió a primera división hasta el día de hoy, en cinco o seis años se disputaron dos finales de la cual una se puede ganar. Haber estado siete años en la B y los otros seis años posteriores crecer tan de golpe, significa que las cosas en el club se han hecho bien. Sabemos que tenemos que seguir mejorando como club, como institución, tenemos muchas cosas para resolver internas sobre todo en las juveniles en cuanto a entrenamientos. El club viene creciendo a nivel socios e infraestructura, con el apoyo de un gran colegio como el San Bartolomé, hace poco se cumplieron diez años de la construcción de este colegio inglés dentro de Old Resian.

– ¿Qué significó haberse consagrado como locales?

Por supuesto que jugar de local una final tiene un gusto especial, sabíamos que era un plus que teníamos. Nos mirábamos con los más referentes y decíamos: ‘muchachos, hoy no se nos puede escapar’. Había una fuerza interna a nivel club enorme y eso hizo que nos ayude muchísimo para el campeonato.

– ¿Qué les dirías a los hinchas de Old Resian?

Quiero agradecerle a todo el club, a todos los socios, las chicas de hockey, los chicos de rugby, infantiles, juveniles, los padres, los managers, toda la gente que nos apoyó este año. Veíamos gente que se iba ilusionando con el correr de los sábados, que se emocionaban y nos venían a felicitar después de ganar partidos definitorios para entrar al Super Four. Agradecerles a la hinchada del Gaucho, que tienen una locura bárbara y son unos chicos espectaculares, también a la organización del torneo. Un mensaje también a los jugadores que tuvo que representar, a los 23, 24 o 30 del plantel de primera, agradecerles porque fueron fieles a mis convicciones, nunca dudaron de mi capacidad, ni de mi confianza, ni de la idea mía de salir campeón. Los convencí que se podía y nunca bajaron los brazos. Tiene un sabor especial porque me tocó ser capitán y comandar este barco de hombres que son unas fieras y me han hecho todo mucho más fácil.