La CGT y las dos CTA marcharon este mediodía a Plaza de Mayo. Juan Carlos Schmid fue el único orador y, entre críticas al gobierno nacional, adelantó que el 25 septiembre iniciarán «un plan de lucha» que incluirá un paro general. La previa incluyó incidentes protagonizados por Camioneros.
El acto convocado por la CGT tuvo el color esperado: movilizó a miles, cortó cientos de calles en el país, tuvo incidentes y comenzó varios minutos antes de lo previsto. También cumplió con un único orador en el estrado, Juan Carlos Schmid, que criticó al gobierno de Mauricio Macri, enumeró la agenda social del sindicalismo argentino y no precisó mucho más: ni fecha de paro general, ni medidas a tomar. Sólo anunció que el 25 de septiembre se lanzará un plan de lucha.
El abanico de demandas de Schmid incluyó el rechazo a la flexibilización laboral y a la reforma previsional. También mostró cautela frente a las elecciones de este año y aseguró que el acto del sindicalismo no es para apoyar ninguna candidatura sino por la agenda social: «Aumento de emergencia para nuestros jubilados, que se terminen las intervenciones en los sindicatos, rechazo a cualquier reforma que lesione nuestros derechos, plena vigencia de los convenios colectivos, control de precios sobre alimentos y medicamentos. Y emergencia social alimentaria para los sectores populares».
Incidentes en la previa
Unos minutos antes de que comience el acto, afiliados al gremio de los Camioneros protagonizaron hoy un incidente en la Plaza de Mayo. La serie de agresiones fueron pasadas las 13.30 y todo indica que fueron movilizadas por la logística y los lugares a ocupar durante el discurso oficial. Entre otros elementos, fueron arrojados entre ambos bandos maderas, botellas, piedras, redoblantes y hasta las cruces en homenaje a los combatientes caídos en la guerra de Malvinas, dispuestas sobre Plaza de Mayo. Los incidentes duraron al menos cinco minutos, hasta que un grupo de afiliados a la UOCRA intercedió para evitar más desmanes.
