Luego del triunfazo de Rosario Central en el trascendental duelo ante Newell’s, el Kily González, entrenador del conjunto canalla, dialogó en conferencia de prensa y se mostró muy feliz por vivirlo de una manera muy particular.
«Esta es una alegría enorme, porque además de mi trabajo, soy hincha del club. Este es el camino. Pusimos juveniles en el campo, recuperamos jugadores que no venían en un buen momento. Estoy alegre por mí y mis jugadores», arrancó el DT auriazul.
Y agregó: «Cuando uno sueña, siempre desea ganar el Clásico. Lo hicimos de manera contundente, siendo protagonistas desde el minuto. El resultado es abultado y bien merecido»
A la hora de buscar la estrategia de juego que tuvo su equipo para someter a la Lepra, el Kily explicó: «Las claves fueron que fuimos a buscarlos desde que arrancó el partido. Fuimos cortos defensivamente y estuvimos sobre Maxi y Pablo Pérez. Casi nunca corrimos riesgos. Buscábamos robar la pelota y llegar con mucha gente»
«Este clásico será recordado por haberse jugado en un marco atípico, en medio de una pandemia, sin gente en la tribuna, y con casi 2 años de diferencia del último Clásico. Gracias a Dios pudimos darle una alegría a la gente».
Sobre Ruben, que abrió el marcador en la noche del Gigante, el técnico de Central deslizó: «Marco Ruben es el ejemplo del amor a la camiseta. Lo mismo para Vecchio y Broun. En una charla previa al campeonato les recordé que cuando eran pibes, yo era su capitán. Y ahora nos toca en este rol distinto para todos».
Por último, el Kily González dejó en claro la idea que pregona su cuerpo técnico desde que dirige al primer equipo: «A los jugadores siempre les digo que somos un plantel corto y que deben estar listos para jugar. Nosotros trabajamos de la misma manera desde que asumimos. Esta claro que hicimos un click en la manera en la que había que sacrificarse. Venimos intentándolo hace mucho, a veces sale y otras no. Que esto de confianza para crecer».
