Tras dos meses de audiencias, este martes el tribunal formado por Marcela Canavesio, Juan Carlos Leiva y Rodolfo Zvala dio a conocer la sentencia por el juicio de la explosión de calle Salta 2141, la peor tragedia que enlutó la ciudad ocurrida el 6 de agosto de 2013, que tuvo como única querellante a la familia de Débora Gianángelo, una de las víctimas fatales. Los once imputados, a quienes se les achacó el delito de estrago culposo agravado por las 22 muertes, escucharon la decisión de los magistrados sentados en el banquillo de los acusados de la Sala 7 del Centro de Justicia Penal.
Los jueces resolvieron condenar a cuatro años de prisión efectiva al gasista Osvaldo Carlos García como autor responsable del delito estrago culposo agravado y absolver por insuficiencia probatoria a Pablo Miño (ayudante de García); José Luis Allala (gasista que trabajó en el edificio días antes de la explosión); Norma Bauer, Mariela Calvillo y Carlos Repupilli (responsables de la administración); Guillermo Oller, Luis Curaba y Gerardo Bolaño (reclamistas de Litoral Gas); Claudio Tonucci (jefe de mantenimiento de redes de Litoral Gas); y Viviana Leegstra (gerenta técnica de Litoral Gas).
Para la fiscalía, compuesta por Graciela Argüelles, Miguel Moreno, Valeria Piazza Iglesias y María Eugenia Iribarren, el estallido fue producto de las negligencias de nueve de los once involucrados para quienes solicitó la pena máxima de 5 años de prisión efectiva prevista por el Código Penal. En tanto, los funcionarios pidieron la absolución para Allala, el gasista que realizó tareas en el edificio días previos a la tragedia, lo mismo que para el reclamista Gerardo Bolaño, lo cual los diferenció de la querella que exigió las condenas máximas para todos los acusados.
