21°
viernes 29 de marzo del 2024

“El 70% de lo recolectado son plásticos»

La jornada de limpieza del Paraná “1 Día + Río – Basura” reunió a más de 100 voluntarios, que durante todo un día realizaron tareas de concientización a lo largo de la costanera del Río Paraná y recolectaron residuos de ambas márgenes. Las organizaciones medioambientalistas difundieron las conclusiones y encendieron la alarma: se juntaron más de 1000 kilos de residuos. Y un 70% de ese total son plásticos, material que demora cientos de años en degradarse y no es reincorporado a los ciclos naturales.

La jornada de limpieza fue el domingo 12 de noviembre y fue impulsada por 16 organizaciones e instituciones de la ciudad, que se unieron en pos de visibilizar la problemática que representan los residuos en nuestra ciudad y su impacto, particularmente en los humedales. “Es urgente que las empresas se responsabilicen por los impactos ambientales de sus productos y se desarrollen políticas públicas que pongan un fuerte énfasis en la reducción de descartables y en el mayor uso de envases reutilizables”, señaló, a través de un comunicado, el conjunto de organizaciones a cargo de la actividad.

Ese domingo, la actividad convocada se dividió en dos partes: durante la mañana se visitaron 15 guarderías, clubes náuticos y algunos puntos característicos de la ciudad, como La Florida y La Fluvial. Allí, se repartieron bolsas de residuos para que aquellos que salieran al río traigan su propia basura y algo más de la que fueran encontrando. Los voluntarios, además, aprovecharon para explicar el sentido de la actividad y la problemática a quienes disfrutaban del día.

La tarde se ocupó en realizar acciones concretas de limpieza en los alrededores del Acuario del Río Paraná y se recolectaron las bolsas traídas por quienes se sumaron a la campaña. También se recorrió la reserva privada y la playa de Baigorria, la zona de islas de enfrente, El Saco, Costa Alta, El Espinillo, entre otros. Se estima que se juntaron más de 1000 kilogramos de residuos, todos acumulados , tal como señala el comunicado, por «las prácticas desaprensivas de cada ciudadano, por la gestión inadecuada de los residuos, y, principalmente, la producción y consumo indiscriminado de envases descartables».

De los residuos recolectados, una muestra representativa fue analizada para su caracterización. Los resultados preliminares son alarmantes: alrededor del 70% son plásticos, un material que demora cientos de años en degradarse, por lo que no es reincorporado a los ciclos naturales. «Estos plásticos, cuando llegan a las corrientes de agua, tienen un gran impacto en los animales que allí habitan, que en muchos casos los confunden con comida y los ingieren. Y así, no sólo perjudican la fauna, sino que también ingresan a la cadena trófica y pueden llegar hasta nuestros platos», explicaron las organizaciones locales.

En el análisis realizado las botellas de bebidas representaron un 23% de los residuos encontrados, convirtiendo a este producto, pensado desde su concepción para ser descartado tras un único uso, en el residuo más importante en el total recolectado. Le siguieron en similar proporción las bolsas y envoltorios plásticos.