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miercoles 24 de abril del 2024

Irán: una mujer kurda fue ahorcada por el régimen

Los Persas no investigaron. Actuaron, nuevamente. Esta vez ahorcaron a una mujer que había sido condenada a muerte por apuñalar a su marido cuando era menor de edad (17). El crimen lo había confesado bajo tortura, aunque después se retractó, vislumbrando una serie de agresiones y pactos secretos que las autoridades iraníes decidieron no explorar, avanzando en el cumplimiento de la pena máxima.

La joven de 24 años, originaria de Kurdistán, tenía un pasado muy turbio. Había sido víctima de violación por parte de su marido y de su cuñado. A los 15 años contrajo matrimonio con el hombre al cual luego asesinaría a puñaladas en 2014. La ONG afirmó: «Era menor cuando fue detenida y condenada a raíz de un juicio injusto. Afirmaba haber sido torturada durante su detención por los policías» y agregaron que este accionar de los oficiales fue para hacerla confesar sus actos. A la hora de la confesión del asesinato, Zeinab Sekaanvand acusó,tanto a su marido como a su cuñado de practicarle reiteradas violaciones, sumadas a agresiones físicas y verbales.

Por otra parte, la ejecutada solamente había recibido servicios de un abogado en el último tramo del juicio, mediante el cual logró retractarse de la nombrada confesión, diciendo que fue bajo abuso policial. Y aclaró que, en realidad, su esposo fue asesinado por su hermano, el otro masculino que la violaba. Éste último la convenció de que se haga cargo de la muerte y luego él la perdonaría (acción permitida por la ley islámica). Pero todo esto, más la retracción, fue rechazado por el tribunal, que avanzó hasta llegar a ejecutarla.

Amnistía Internacional, a través de su responsable Philip Luther, dijo:»es profundamente injusta y muestra del desprecio de las autoridades iraníes por los principios del derecho de los niños a la vida. Zeinab solo tenía 17 años en el momento de su detención». Luego agregó: «El hecho de que su condena a muerte se produzca a raíz de un juicio manifiestamente injusto hace todavía más escandalosa su ejecución». 

Es el quinto acto con estos tintes que practica Irán en lo que va de 2018. La ONU informó que este país es el que posee el mayor número de ejecuciones a menores en la década en todo el mundo.