Dentro de los test de alcoholemia y narcolemia que realiza la Secretaría de Control y Convivencia de la Municipalidad de Rosario a los automovilistas en la vía pública, en la madrugada del lunes, se registró un incidente que pudo terminar en tragedia.
Un conductor se dio a la fuga para evitar el control de alcoholemia realizado por personal municipal en la esquina de Urquiza y Vera Mujica. Todo terminó con un choque donde no hubo que lamentar víctimas, aunque las pérdidas materiales fueron considerables. El hombre tenía 1,18 miligramo de alcohol en sangre, cuando lo admitido es 0,50. Además había fumado marihuana.
Sin embargo, tras el fuerte impacto el conductor de Chevrolet fue sometido a los tests de alcoholemia y narcolemia. En el primero de los casos los registros arrojaron un exceso de alcohol al volante de 1,18 miligramo por litro y narcolemia positiva de cannabis. En la requisa del vehículo que conducía el infractor, la policía detectó una réplica de arma de fuego en el interior del rodado.
Como consecuencia del incidente y de las infracciones, tanto el conductor como el vehículo terminaron en la comisaría 7ª donde se labraron las actuaciones del caso.
