Pese a que la semana pasada y de forma oficial FIFA había emitido un comunicado con respecto a las medidas por el coronavirus, en el que se dejaba en claro que se extenderían de forma automática los contratos con vencimiento al 30 de junio hasta la fecha en la cual terminen las vigentes temporadas, en las últimas horas se dio marcha atrás.
Es decir, se generó una especia de gris en lo reglamentario, ya que fue el director legal de la entidad que rige al fútbol mundial, Emilio García Silvero, aseguró que no se pueden prorrogar esos vínculos porque esto podría hacer que se incumpla el derecho laboral de los jugadores y que se originen reclamos.
«FIFA no puede prorrogar los contratos más allá del 30 de junio, pero las ventanas de transferencias no van a ser las mismas y los jugadores no van a poder ser inscritos. El 1 de julio no se abre el mercado», aclaró Silvero, abriendóle las puertas a una nueva complicación.
De esta manera, los futbolistas quedarán entre la espada y la pared, porque podrán quedar con el pase en su poder pero no podrán jugar en ningún equipo hasta que no se abra el nuevo período de traspasos, el cual está previsto para octubre y noviembre de este año.
También afectará esta normativa a todos aquellos que están a préstamo en otras instituciones. «Si una cesión finaliza el 30 de junio, el jugador, teóricamente, debería volver a su club, pero la ventana de inscripción no estaría abierta y no se le tramitaría la ficha», explicó el representante del área legal de FIFA.
Para pasar en limpio y trasladando esta situación a los clubes de Rosario, se verán en la necesidad de acordar las renovaciones de: Diego Cocca (la normativa también incluye a los técnicos), Marco Ruben, Sebastián Ribas, Claudio Riaño y Nicolás Colazo por el lado de Central; Frank Kudelka, Nelson Ibáñez, Cristian Lema, Mariano Bíttolo, Mauro Formica, Rodrigo Salinas y Lucas Albertengo por parte de Newell’s.
