Un médico se defendió a los tiros de un robo en la puerta de su casa. Todo ocurrió en Buenos Aires este fin de semana, cuando el doctor regresaba a su casa junto a su familia. Este lunes, Ernesto Crescenti, protagonista en esta historia, habló con la prensa y aseguró: «Es tu vida o la de ellos».
«Esto es una fracción de segundo, tu vida o la de ellos; si no pasaste por lo que pasé yo, hay personas, inclusive policías, que no están preparados para estas situaciones», afirmó durante la mañana de este lunes.
Cuando Crescenti se ponía a buscar las valijas de su coche, cuatro delincuentes armados lo abordaron por detrás: «Yo salí a buscar las valijas con mi arma porque no es el primer episodio que tuve, de pronto veo que un auto aminora su marcha y baja un tipo a los tiros, y yo repelí la agresión».
El primer episodio lo sufrió en 1995, cuando lo balearon en Villa Caraza, en la localidad bonaerense de Lanús, momento en el que se encontraba trabajando: «Me pegaron un tiro, me sacaron el bazo, 40 centímetros de intestino, tengo una bala en la quinta lumbar y pasé una semana en terapia intensiva», contó.
La pistola que utilizó en esta segunda ocasión Crescenti es calibre .357 marca Glock, de la cual es legítimo portador. La inesperada reacción de la víctima sorprendió a los ladrones, que escaparon sin concretar el robo.
Según publica Infobae, minutos más tarde del hecho, se supo que un hombre que ingresó con una herida de arma de fuego al Hospital Penna del barrio de Parque Patricios y murió. La policía investiga si se trataba de uno de los ladrones. «Si es así, lo lamento», dijo el médico.
Ernesto Crescenti es médico egresado de la Universidad de Buenos Aires (UBA) en 1997, especializado en ginecología, obstetricia y cirugía general, abrió el Instituto Inmuno Oncología «Dr. Ernesto J. V. Crescenti», un centro médico privado dedicado a la atención, diagnóstico y tratamiento de pacientes con cáncer. Es primo del titular del SAME, Alberto Crescenti.
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