«Cualquier volante hoy en día tiene que ser bastante completo. Debe tratar de llegar al gol, pisar el área. Si uno deja de hacer eso seguramente no esté a la altura de lo que pretende el entrenador. Por suerte es un mérito que siempre tuve en mi carrera», fue la frase de Diego Zabala tras la victoria 1-0 sobre Talleres por su tanto, al ser consultado por la virtud que tiene de pisar el área rival con frecuencia.
Y no es casualidad lo que sucedió el pasado sábado en el Gigante cuando Lucas Gamba ejecutó un pase a la cabeza de Sebastián Ribas que con la testa asistió al volante uruguayo que por sorpresa se infiltró en los metros decisivos del campo de juego para tocar suavemente para vencer a Guido Herrera.
De hecho, desde que Zabala hizo su aparición en el fútbol argentino a comienzos de 2016 vistiendo la camiseta de Vélez (le anotó a Central un doblete en una victoria de los de Liniers 3-2 en el Gigante), lleva 18 gritos en total y 16 de ellos fueron dentro del área (el 88,88 por ciento), con variedad de definiciones, de derecha, de zurda y de cabeza.
Jugando en el Fortín, el mediocampista oriental de 27 años convirtió seis tantos en 34 encuentros y todos fueron en este sector decisivo de la cancha, mientras que en el Tatengue fueron 11 conquistas y sólo dos fueron desde fuera del cuadro mayor: uno en la victoria 3-2 contra Patronato en Paraná en 2017 (en la cual marcó un doblete Ribas para el local y Gamba también anotó para la visita) y el otro frente a Racing en un triunfo 2-1 en Santa Fe a comienzos de 2018.
Sus goles en Vélez
El primero que anotó en Unión, también fue en Rosario
La ciudad en la que ahora vive, le sienta bien a Zabala. Su primer grito en Central fue como local el último sábado, como el mencionado doblete contra su actual equipo con la camiseta de Vélez en 2016. Lo mismo repitió cuando tuvo su bautismo en la red con los colores de Unión, ya que fue en el inicio de la Superliga 2017/18 en el 1-1 contra Newell’s en el Coloso. Como no podía ser menos, convirtió en su hábitat natural.
