La Conmebol sigue a preparando los partidos finales de la Copa Libertadores y de la Copa Sudamericana. Ambos serán en noviembre en Uruguay, en el histórico Estadio Centenario de Montevideo que sufrió reformas para albergar los encuentros decisivos, en los que la Confederación Sudamericana efectuó una solicitud especial.
La comunicación, fue a través de una carta que el presidente de la Conmebol, Alejandro Domínguez, le envió al presidente de la FIFA, Gianni Infantino. Por lo que informa en el primer párrafo, la solicitud ya fue hecha en marzo a la International Football Association Board (IFAB), que es la entidad encargada de definir las reglas del fútbol a nivel mundial y sus futuras modificaciones.
El pedido consta de una modificación en los descansos de cada una de las finales, donde se pide reemplazar los habituales 15 minutos por 25 minutos, con el fin de “ofrecer un espectáculo artístico de alta calidad a los hinchas presentes en el estadio y a los que siguen la transmisión televisiva”.
Además, aclara en que los jugadores tengan una mejor recuperación y que los entrenadores dispongan “de la oportunidad de hacer ajustes más precisos o dar instrucciones más claras”. Además, apunta a que quizás los cotejos puedan llegar a una duración de 120 minutos ya que habrá alargue y ante la posibilidad de una definición por penales. Además, se plantea un resguardo a los futbolistas en cuanto “a la enorme exigencia física y una extrema tensión psicológica”. Y se aclara que el pedido es sólo para esos dos partidos.
