El Gobierno apeló la excarcelación de Amado Boudou a través de la Unidad de Información Financiera, dirigida por Mariano Federici. La medida había sido resulta por el Tribunal Oral Federal 4 mediante votación dividido. De este modo, se solicitó a la Cámara de Casación Federal que el ex vicepresidente condenado por el caso Ciccone regrese a prisión.
Las juezas María Gabriela López Íñiguez y Adriana Pallioti votaron a favor de la excarcelación de Boudou, quien se encontraba preso desde el 7 de agosto condenado por cohecho y negociaciones incompatibles. El juez Néstor Costabel votó en rechazo de la excarcelación pero el ex vicepresidente regresó a su casa con una tobillera electrónica.
El Gobierno fundó su apelación en cuatro argumentos por intermedio de la UIF, querellante de la causa. No obstante, las juezas que ordenaron su liberación fundamentaron para su excarcelación que no existían “circunstancias para presumir el peligro de fuga” del vicepresidente, remarcando que de acuerdo con las normas vigentes, la regla es la libertad durante el proceso.
