La muerte de Miriam Soto, la enfermera del Heca que falleció por coronavirus este fin de semana, causó profundo dolor en la comunidad médica del nosocomio. La mujer de 54 años fue despedida en medio de una infinita consternación por sus compañeros que le dieron el último adiós en la puerta del hospital en la que se desempeñó durante décadas.
Los compañeros de Soto se apostaron en la puerta del Heca la mañana del martes, en calle Pellegrini y Vera Mujica para rendirle homenaje. Los abrazos , las lágrimas, los aplausos y los sollozos fueron el denominador común en el marco de la sentida despedida. Soto era mamá de tres hijos y una compañera adorada por sus colegas.
«Este momento tan difícil nos une. Miriam era una trabajadora incansable, siempre predispuesta, de una trayectoria impecable y en continua formación, expresó Jorge Bittar, director de la dependencia de salud, quien contó que trabajó con Soto como médico de guardia. «Era una enfermera como las de antes, con una mirada te decía prácticamente lo que tenías que hacer», destacó, visiblemente conmovido.
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— Mauro Yasprizza (@MauroYasprizza) December 8, 2020
La noticia se conoció este lunes feriado. La enfermera, que también trabajó en el Centenario, había estado dos meses internada y no pudo susperar la enfermedad.
