20°
viernes 19 de abril del 2024

Doble crimen narco en barrio Larrea: revelan detalles del trasfondo de la emboscada

La fiscal Georgina Pairola brindó una conferencia de prensa por los asesinatos de Marcos Caminos y su bebé Ciro.

Luego del doble crimen ocurrido el sábado pasado en calle Colombia al 1300 bis, barrio Larrea en la zona noroeste Rosario donde asesinaron a balazos a un joven de 26 años y a su bebé de uno, la fiscal de Homicidio Dolosos Georgina Pairola aportó más detalles y explicó las circunstancias en la que se perpetró el feroz ataque.

Según refirió la funcionaria, la hipótesis más robusta por el momento es la de una emboscada con posibles vinculaciones con el comercio de drogas, ya que en la casa de las víctimas hallaron ocho ladrillos de marihuana y más de 80 dosis de cocaína.

«Había una gran cantidad de vainas servidas. El vehículo tenía más de 30 disparos. Vamos a documentar dónde estaba cada uno de los tiradores, que se presume que eran entre dos y tres. Se bajaron de una camioneta», expresó Pairola en una conferencia de prensa que se llevó a cabo en el Centro de Justicia Penal.

Sobre el posible móvil del hecho, comentó que todavía debe establecerlo, ya que no tiene claro si se habría tratado de una pelea entre bandas o una interna de una misma organización narco. Consultado por un ajuste narco, respondió: «Estaría relacionado. Está abonado por el secuestro de droga posterior y por los antecedentes».

En este contexto, cabe aclarar que el conductor acribillado era Marcos Máximo Caminos, de 27 años. Integra el clan Caminos (cuya mayor referencia fue Roberto “Pimpi” Caminos), ex jefe de la barra brava de Newell’s–, y se sospecha que era uno de sus sobrinos.

En el domicilio de Marcos Caminos, la Brigada de Homicidios de la Agencia de Investigación Criminal secuestró 6,4 kilos de marihuana; 81 dosis de cocaína; casi 8 mil pesos y 100 dólares.

Además, la fiscal agregó que tras el doble crimen fue encontrada en llamas una camioneta a pocas cuadras del hecho. Se presume que sería la usada por los sicarios, ya que respondía a las mismas características que las descriptas por testigos del brutal ataque.

El posible vehículo usado para la emboscada habría sido una Ford Ranger que había sido robada bajo la modalidad «levante» el pasado 21 de abril.