Más de 70 mil personas se pasaron a la salud pública en Rosario en los últimos dos años. La cifra fue informada por el Secretario de la Salud Pública Municipal, Leonardo Caruana, quien a la vez señaló que, el 65 por ciento del presupuesto municipal es utilizado para la compra de descartables y medicamentos.
En diálogo con Radio Mitre Rosario, el funcionario contó que, desde enero a agosto de este año, se incorporaron unas 32 mil personas a la salud pública, sumando así un total de 70 mil en los últimos dos años.
Asimismo, Caruana señaló que, el 90 por ciento de esas 32 mil personas, perdieron la obra social por falta de trabajo, hay un 10 por ciento restante que tiene algún tipo de seguridad social, pero que comparte con el sector público alguna atención.
“Estamos viendo este escenario con mucha preocupación porque co-existen con variables de inflación y de la afluencia del dólar que impacta profundamente en el funcionamiento de los servicios de salud”, expresó y afirmó: “Tuvimos que enlentecer obras, dejar de comprar capital, para priorizar la compra de insumos y de medicamentos “.
En concordancia, el funcionario indicó que, el 65 por ciento del presupuesto se lo llevan los materiales descartables y medicamentos. “Todo esto ha sido muy crítico post devaluación, tuvimos que generar mecanismos distintos de compra, uno de ellos es la Ordenanza del Concejo Municipal, que nos permitió modificar los mecanismos de compra que establece la ley de contabilidad y comprar en menos plazos pequeñas cantidades y repetir los ítems, eso nos permite que se presenten con valores de precios no superiores a la inflación y nos permite subsistir hasta fin de año”, detalló.
Consultado sobre si están garantizados los insumos y medicamentos en el Estado Municipal, Caruana manifestó que “son prioridad” e inclusive, aseveró que se han tenido que generar cambios las fórmulas terapéuticas ya que, hay medicamentos que han aumentado entre un 200 y un 300 por ciento.
“Los medicamentos más caros y más complejos, las prótesis más complejas, los anticuerpos monoclonales y/o oncológicos de última generación, dependen de un financiamiento nacional y esto es lo que se vienen desdibujando en los últimos años”, remarcó y añadió: “re ajustamos lo que no se puede dejar de atender, estamos preocupados porque no hay un sistema de salud sustentable integralmente en un municipio, sin aporte del gobierno nacional”.
“El gobierno nacional a través de la secretaría de Salud, ha definido y ha puesto el recorte de los derechos sociales en el mismo camino que las variables y ajustes fiscales y creemos que es un camino equivocado”, concluyó.
