La Policía Federal detuvo a cuatro personas que formaban parte de una red de trata que captaba y transportaba mujeres de nacionalidad coreana y las ingresaba a la Argentina para ser prostituidas en el país, informó la fuerza de seguridad en un comunicado.
De acuerdo al parte policial, se realizó un allanamiento en avenida Carabobo al 1600 en un local «del tipo whiskería», donde se detuvo a su dueño, un hombre de 41 años y nacionalidad coreana.
Según fuentes policiales, se logró incautar documentación que vincula al dueño de la whiskería «no solo como socio gerente del lugar, sino también como cabeza de la organización criminal de trata de personas con fines de explotación sexual internacional».
Luego, en Remedios de Escala de San Martín al 4400, también en la Ciudad de Buenos aires, se llevó a cabo otro procedimiento en un lugar que funciona como un karaoke, donde se rescataron siete víctimas de nacionalidad coreana, mayores de edad y nueve clientes entre argentinos, coreanos y bolivianos.
Además, se logró detener a dos ciudadanos venezolanos que oficiaban de facilitadores para ejercer esta actividad delictiva y que poseen una situación migratoria irregular.
Según informaron fuentes de la Policía Federal, la «madame» del lugar, de nombre Kim, cumplía la función de captadora y transportadora de mujeres de nacionalidad coreana, las cuales eran ingresadas al país para ser prostituidas en el territorio nacional.
Tras la requisa realizada por personal de la PFA en el lugar, se logró incautar documentación que vincula a Kang (dueño de la whiskería) no solo como socio gerente del lugar, sino también como cabeza de la organización criminal de trata de personas con fines de explotación sexual internacional.
