Durante estas últimas semanas, las denuncias por acoso sexual que envuelven a actores de Hollywood, políticos y periodistas han sido un tópico de carácter mundial y han desatado consecuencias que quizás muchos no esperaban.
Todo comenzó cuando Harvey Weinstein, uno de los productores más famosos del mundo, fue señalado públicamente (en una investigación del New York Times) por abuso y acoso.
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A fines de octubre, el actor Anthony Rapp, quien tiene una larga carrera en la comedia musical de Broadway, denunció al reconocido actor Kevin Spacey por intentar avanzar sobre él “con intenciones sexuales”. Es por esto que el protagonista de “House of Cards” escribió un comunicado e intentó explicar la situación.
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Por el lado de la política, el ministro de Defensa británico, Michael Fallon, presentó este miércoles su renuncia por un hostigamiento sexual que tuvo con una presentadora de radio hace 15 años.
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En nuestro país, el caso más resonante fue el del periodista Ari Paluch, quien también recibió denuncias por acoso sexual de una microfonista y una maquilladora de su programa aunque luego se fueron conociendo más testimonios que complicaron su situación. A raíz de eso, Paluch fue despedido de su programa “A24”.
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Sabrina Cartabia, presidenta de la Asociación Civil “Red de Mujeres”, habló con Radio Mitre sobre esta cuestión: «Todo esto habla de un rango de violencia sexual que va desde un chiste con connotación sexual en un lugar en el cual no corresponde, pasando por actitudes que tienen que ver con tocamientos que no son debidos y que pueden llegar al extremo de la violación o la trata de personas con explotación sexual”, explicó.
A la hora de introducirse en la parte legal del tema, la mujer aclaró que la diferencia entre acoso y violación es lo que está definido en el tipo penal. «La ley argentina reprime con prisión de tres meses a cuatro años al abuso sexual. Y de seis a quince años se reprime el acceso carnal”, precisó.
Al momento de hablar sobre estos casos que han sido reconocidos a nivel mundial, la abogada dijo que, «cuando hay una situación de poder, el tema se agrava». «Los acosos sexuales son actitudes que tienden a poner incómoda a la mujer. Actitudes que durante mucho tiempo fueron toleradas o tomadas como algo natural. Hoy en día estamos viendo que hay un cambio de paradigma”, concluyó la referente de “Red de Mujeres”.
