La ‘fiebre Maradona’ parece que tendrá su fin este sábado en el Gigante de Arroyito. Desde la comisión directiva de Rosario Central adelantaron que no prepararán ningún recibimiento especial para el entrenador de Gimnasia, medida opuesta a la que ocurrió en cada una de las canchas que visitó ‘Pelusa’.
No habrá a ningún dirigente entregándole una plaqueta, tampoco existirán cuadros con su figura, ni banderas en la tribuna ni trono. La decisión se contrapone a la tomada por todos los clubes que hasta ahora tuvieron a Maradona visitando su estadio para un partido de la Superliga. El DT tripero recibió sentidas muestras de cariños, a la que se encargó de agradecer en cada ocasión.
El desembarco en Rosario de ‘Pelusa’ no genera aceptación, admiración e idolatría absoluta, sino que da el lugar al debate en las mesas de café y en las redes sociales entre hinchas auriazules. Maradona vistió los colores de Newell’s en los 90 y en más de una ocasión declaró en contra de la institución de Arroyito, recordando algunas de las cargadas folcklóricas del club del Parque de la Independencia. Más de un hincha memorioso no lo perdona.
Diego estará otra vez en Arroyito tras casi 11 años, luego de aquel 5 de septiembre del 2009 cuando Argentina cayó 3 a 1 como local ante Brasil en un partido de Eliminatorias para el Mundial de Sudáfrica de 2010. El escenario fue el Gigante por decisión de Maradona, por aquel entonces entrenador de la Selección Argentina, quien pidió un estadio donde se sienta la presión del público. Días previos al partido, el ex campeón del mundo había dicho que «la cancha de River no te da el aliento que te da la de Central».
Llegado el sábado a las 19.40 los hinchas canallas darán el veredicto final, pero en el mientras tanto, los directivos auriazules ya definieron su postura.
