El paro de colectivos en Rosario se sostiene y los más de 40 días sin este servicio dentro de los últimos dos meses repercute directamente en el otro bastión fundamental del transporte público de la ciudad: los taxis. Según aseguran desde el sector, que no estén circulando los ómnibus les dio «un respiro, pero no la vida», y afirman que están «muy mal económicamente». Tampoco están contentos con el hecho de tener algo más de trabajo por la medida de fuerza «porque le hace un daño a la población en general».
Al respecto, el titular de la Cámara de Titulares de Licencias de Taxis de Rosario, José Iantosca, admitió: “Por supuesto que estos 40 días de paro al taxi le han dado una muy buena mano, nos han dado un respiro. Tuvimos un respirador artificial y hasta ahora tratamos de seguir adelante. El taxi se convirtió en un transporte esencial, llevando a toda la población de Rosario. Con cuentas corrientes que armaron las empresas de Radiotaxis, llevando a los enfermeros y médicos a los distintos hospitales y sanatorios”.
“Nos dio un respiro, pero no nos dio la vida. Económicamente estamos muy mal, más del 50 por ciento de los titulares de taxis no recibió ninguna ayuda”, aseguró el referente del sector y agregó: “El turno noche sabemos que está parado, no hay bailes, no hay casino, no hay ninguna movida, la noche murió. Menos del 10 por ciento de los taxis están trabajando. Aclaro, si bien nos dio un respiro, no quiere decir que nosotros estemos salvados o fuera de la pandemia”.
Sobre lo que les representa el leve incremento en los viajes por el paro de transporte, Iantosca dijo: “No nos seduce trabajar por la falta de colectivos, porque sabemos que le hace daño a la población en general. Daño a los comerciantes, daño al que tiene que ir a trabajar, al que le tiene que pagar el taxi al que tiene que ir a trabajar. No queremos que por estos paros o porque los gobiernos no se hagan cargo de los sueldos de los colectiveros, vengan otro tipo de transporte a querer cambiar el sistema de transporte público tan bueno que tenemos en Rosario”.
