“Estoy un poco movilizado y no me es fácil hablar del tema”, dijo Ignacio Gorriz sobre el inminente cierre del centro cultural El Espiral, anunciado esta noche por el propio encargado. El gestor de este espacio y representante de Espacios Culturales Unidos de Rosario dijo que «las políticas culturales desfavorables» por parte el municipio llevaron a esta difícil decisión. “El lugar siempre funcionó, igualmente no podemos seguir adelante”, dijo conmocionado.
“Tiene que ver con lo económico. A mí se me ha replanteado la palabra funcionamiento, la posibilidad de poner un espacio cultural y sostenerlo en el medio de un montón de políticas culturales desgastantes que hace que uno se vaya cansando y que se nos termine la posibilidad de tener un espacio como el que uno había soñado”, expresó.
Gorriz aclaró que nunca recibieron apoyo por parte del Ejecutivo y agregó: “Lamentablemente el estar habilitados como se puede con un rubro empresarial que nos compromete a hacernos pagar un montón de cosas que no corresponden y además cada inspección significa un trámite, una multa, dinero tirado en fotocopias y tiempo para dar lugar después en un distrito o en un lugar donde te reciba un juez al que hay que contarle toda una historia de por qué en Rosario no existe un rubro dentro de una ordenanza que contemple a los centro culturales”.
La ordenanza que los contemple es una pelea que los espacios culturales vienen dando desde hace un largo tiempo. En el 2015 se presentó por segunda vez y quedó trabada en el Concejo Municipal, lo gestores culturales se tomaron el arduo trabajo de hablar con todos los referentes políticos del Palacio Vasallo, pero no sucedió nada.
En referencia al Estado municipal, Gorriz apuntó: “Para ellos somos invisibles dentro de la política cultural. No puede ser que en dos años hayan cerrado lugares emblemáticos, el Olimpo no está más, La Chamuyera tampoco, y ahora El Espiral no va a estar más”.
Hoy se dio a conocer un comunicado por parte de los integrantes del centro cultural en la red social Facebook donde lamentan el cierre del espacio. El comunicado expresa que se tomó la decisión de darle fin al proyecto luego de 7 años donde se puso “el cuerpo y la cabeza para que la ciudad tenga un espacio donde el arte y la cultura puedan florecer”. Una de las premisas ideológicas del espacio era darles un lugar de valor a los artistas, además de brindar una agenda de más de 15 espectáculos mensuales y un promedio de 20 talleres y 80 alumnos semanales.
“Las urgencias económicas producto de un contexto general desfavorable y la desatención absoluta desde hace años del Ejecutivo Municipal hacia la problemática de los Centros Culturales fue una combinación que desgastó sensiblemente las energías que todo este tiempo mantuvieron vivo al Espiral”, advierte el comunicado.
