La extraña desaparición de Naiara, una niña de 9 años, había conmocionado a toda la localidad bonaerense de WIlde. Su familia, desesperada, pidió ayuda a la policía. Durante 13 horas no hubo rastros de la menor, la buscaron por casi todos lados, cortaron accesos de calle y finalmente apareció: se escondía debajo de la cama de su propia vivienda.
Naiara estaba jugando con sus amigos en la puerta de su casa, cuando terminaron de jugar todos volvieron menos ella. La familia comenzó a preocuparse y preguntar dónde estaba. Sin rastros. Rápidamente allegados quisieron hacer la denuncia pero los uniformados le explicación que había que esperar 24 horas.
La desesperación por hallar a la niña pudo más que los tiempos burocráticos. En la madrugada de este jueves allegados y vecinos del barrio cortaron completamente el acceso Sudeste, a la altura de Las Flores, en Wilde. Al ver la actitud de los vecinos, llegaron los primeros patrulleros para colaborar con la búsqueda.
Casa por casa, la policía buscó a la menor en la zona de Villa Azul sin encontrar ni un solo rastro. Y cuando la desesperación secaba la garganta y quitaba el aliento de todos sus seres seguidos, llegó el alivio: Naiara acababa de aparecer.
Para sorpresa de todos, las buenas noticias llegaron desde su propia casa. La niña de 9 años estuvo todo el tiempo escondida debajo de su cama. «Ayer la busqué en ese lugar y ella no estaba», explicó en TN su tía Celeste. Y además dijo: «Está muy shockeada».
Ahora la menor fue trasladada por la policía a la comisaría de la zona y luego será sometida a una revisación médica de rutina. «Está asustada, pero ella dice que nadie le hizo nada», dijo su familia.
