Gabriel Sanabria, el joven policía que estuvo al borde de la muerte tras recibir diez balazos en un operativo en la zona sur de Rosario, fue recibido este lunes con una multitudinaria caravana en San Javier, su ciudad natal, tras haber sido dado de alta.
El oficial fue dado de alta después más de dos meses internado y emprendió su regreso. En ese sentido, familiares, amigos y toda la comunidad de San Javier lo recibieron de una sentida manera.
El joven policía anticipó que seguirá en la Policía de Santa Fe, aunque ahora se predispone a descansar, a recuperarse por completo y a recibir el cariño de sus familiares y amigos: «Ahora a disfrutar de lo que queda de vida, quiero agradecer a este equipo de trabajo porque entré en silla de ruedas y me voy caminando». expresó.
«Volvería a trabajar como un día normal. Son gajes del oficio y le pudo haber pasado a cualquiera», continuó.
Sanabria ingresó en grave estado al Heca el 27 de Mayo pasado, luego de recibir 10 disparos en un operativo de tránsito en Arijón al 400. Tras 55 días internado, Sanabria recibió el alta días atrás y continuó su recuperación en una clínica especializada en rehabilitación integral, ubicada en Paraguay al 2200.
